El Peregrino

Durante la

sábado, 21 de mayo de 2011

Procesos 1: La muerte del Peregrino

"...To live, not to breathe, to die in tragedy.... to run, run far away, to fight what you belive..." (green Day Jesus of Suburbia)
Camaradas les tengo dolorosas noticias, hoy ha muerto el Peregrino, una bala le voló la tapa del cerebro dejando libre su alma presa, pero no crean que fue la bala lo que lo mató, no camaradas, fue la sociedad, la sociedad que nunca creyó en él, fueron los amores a los que se inmortalizó que jamás le correspondieron, fue el dolor y la nostalgia de una tierra lejana, fue el éxtasis de la monotonía, fueron los sollozos de una sociedad decadente, en fin fue la misma sociedad la que le dio muerte.
Mi nombre es Carlos, yo soy el creador del Peregrino, no crean que me es placentero darles dichas noticias, ni que busco vuestro sufrimiento, simplemente es de entender, su cuerpo ya no aguantaba las presiones de su libre alma, el dolor, la monotonía y los distintos sufrimientos se volvieron una sobredosis que no pudo aguantar y con un certero disparo dejó libre su mente del peso de su cuerpo, su alma pudo escapar para correr entre las laderas, volar y ser libre, porque es lo que siempre quízo ser libre.
Sin embargo él me pidió que les dejara una última nota de aquello que deseaba decir antes de partir:
Estimados compañeros, parto en un viaje que todos hemos hecho, es necesario morir para renacer a una mejor vida, ha un nuevo día, puedo ver las lágrimas correr por los rostros de sus almas, pero no temáis porque siempre estaré allí para ustedes, en cada entrada, en cada comentario siempre me podréis ver y recordar, me voy porque esta sociedad no me ha entendido, porque la soledad se ha vuelto la peor de las cárceles y porque mi locura no me permite seguir adelante.
Sin embargo no quiero que olvidéis esto, soy un ser eterno, siempre podréis verme y nunca moriré porque ahora vivo también dentro de ustedes, ahora me veis caído y destrozado, pero recordad mis palabras, el caer solo es un impulso para levantarse, no lloréis por quien ha caído porque he de volverme a levantar, y entonces entenderán el sentido de mi caída y como con ello vencí las cadenas de la opresión y las ataduras del pasado...
Me despido de ustedes con mi más amplia sonrisa, porque este lugar fue siempre mi refugio y consuelo, un monasterio sin paredes para reflexiones virtuales.
La sociedad y el dolor me han destruido, es necesario que me renueve, es necesario que me destruya para volverme a construir, es mi voluntad al igual que la de mi creador seguir adelante en los planes de la vida, pero no temáis, porque me vereis volver"
Los ama mucho
El Peregrino
Con estas palabras cerró su carta antes de partir hacia su proceso interior y hacia su éxodo más grande, al igual que todos ha muerto, ha muerto para volver, ha muerto para morir a la sociedad, para morir a las cadenas del pasado y las ataduras del futuro incierto, los que escucharon el disparo alcanzaron a ver su alma partir a toda velocidad mientras su cuerpo se transformaba en cenizas que cubrieron bosques y valles, las cuales fueron esparcidas por el viento hacia todas las direcciones para que por última vez fuera escuchado su grito de rebeldía, porque como ha dicho y está escrito, es necesario que muera el más inocente para acabar con las altanerías, con la superioridad y con el aislamiento, necesaria es su sufrida muerte para que con ella ardan las últimas cadenas del pasado y el espíritu sea libre.
Repito, esta no es la última entrada, pero el peregrino no volverá hasta que se cumplan sus palabras donde prometió alzarce de entre los caídos...
Carlos

lunes, 16 de mayo de 2011

Nadando en un pozo profundo...

La mente se transforma día a día, sin embargo hay cosas que se quedan, cosas que se arrastran desde siempre y que por más que las evitemos siempre están ahí recordándonos quienes somos.
Este tipo de situaciones, de anécdotas, reacciones, formas de pensar, sentimientos e impulsos son los que nos dan personalidad, por un lado no nos permiten  progresar y por el otro nos definen como seres diferentes pero equivalentes entre si.
Nadando en un pozo profundo...
Nadando sin saber a donde ir,
Escribiendo para mis adentros y tratando de revivir una llama antigua.
Es hora de cambios, de asentamientos y de aceptaciones, momentos en que nos damos cuenta que no podemos conformarnos con lo que se presenta a nuestro alrededor.
Momentos donde la pasión nos hace aumentar el deseo, el deseo de desear, de buscar algo, de motivarse, deseo de actuar y deseo de sentido.
Nunca nos podremos conformar con nuestro entorno, porque nuestra alma es progresista, entonces descubrimos que la vida simple, el manejo del estado, las diferencias, son cosas que nos impiden vivir, incluso algunos llegan a perderse entre las montañas o la droga con tal de alejarse de dicha realidad, realidad que otros han creado y que dicen imponernos, realidad que nos ajusta o nos desecha según convenga, pero que nunca nos acepta del todo.
En esos momentos encontramos a la soledad como única compañera, descubrimos que la muerte es un simple premio por una buena vida y que hay que aguantar mientras las lecciones sigan; sonará irónico, evitamos a la sociedad pero no evitamos la vida, pero esa es la manera en que nos manejamos, porque es difícil entendernos, porque ni nosotros sabemos bien que queremos. Somos un rizoma en constante acción en búsqueda de un sentido que se genera en cada ayer y que motiva a cada hoy, donde las memorias se entremezclan creando lagunas de fantasía y sin sentido, donde motivaciones del ayer son decepciones del hoy, donde la vida nos suelta al ruedo como ir a la guerra sin fusil y nos defendemos con lo que tenemos.
¿Porqué vivir una vida así?
porque sí
¿porque morir a una vida así?
Por cobardía a las lecciones que la vida y el destino nos deparan.